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Las lesiones de los ligamentos de la rodilla son esguinces o desgarros en uno (aislado) o varios (combinados) de los cuatro ligamentos principales que conectan el fémur con la espinilla y los huesos de la pantorrilla. Con mayor frecuencia, se deben al contacto directo o a los cambios de dirección rápidos durante los deportes o la actividad física.
La rodilla tiene cuatro ligamentos principales. Hay dos ligamentos cruzados, situados en el centro de la articulación de la rodilla, que intervienen en el movimiento hacia delante y hacia atrás. Hay dos ligamentos colaterales, que recorren los lados de la rodilla, que intervienen en el movimiento lateral y la estabilidad. Pueden producirse esguinces o desgarros en cualquiera de estos ligamentos:
- Ligamento cruzado anterior (LCA): recorre la parte delantera de la rodilla.
- Ligamento cruzado posterior (LCP): recorre la parte posterior de la rodilla.
- Ligamento colateral medial (LCM): recorre el interior de la rodilla.
- Ligamento colateral lateral (LCL): recorre la parte exterior de la rodilla.
Los síntomas de un desgarro de LCA, LPC, LCM o LCL incluyen dolor, inflamación, un sonido de chasquido durante la lesión, una sensación de flojedad en la articulación y la imposibilidad de caminar o mantenerse de pie. Los daños van desde un esguince leve hasta un desgarro completo, y pueden ocurrir con otras lesiones de rodilla, como la rotura de menisco.
Si tiene un dolor de rodilla de moderado a grave debido a una lesión de ligamentos, llame a un especialista en ortopedia del University of Miami Health System. Ofrecemos citas lo antes posible, a menudo el mismo día o dentro de las 24 horas.
Tratamientos
Método de RICE
La mayoría de las lesiones leves de rodilla se resuelven con tratamientos caseros, que incluyen reposo, hielo, compresión y elevación (método de RICE).
Antiinflamatorios
El médico puede recetarle un antiinflamatorio o recomendar uno de venta libre, como ibuprofeno, para reducir la inflamación y el dolor.
Estimulación eléctrica
El médico puede recomendarle que se someta a un tratamiento de estimulación eléctrica para aliviar la lesión.
Fisioterapia
Es posible que deba trabajar con un fisioterapeuta para recuperar la fuerza y el uso después de una lesión.
Cirugía
Si la afección de rodilla no ha respondido a otras opciones de tratamiento, es posible que necesite una intervención quirúrgica, como una prótesis de rodillas.
Pruebas
Exploración completa
El médico realizará un examen completo y revisará su historia clínica para diagnosticar una lesión del ligamento de la rodilla.
Diagnóstico por imágenes
El médico puede solicitar una prueba de imagen como una radiografía, una tomografía axial computarizada (TAC) o una resonancia magnética (RM) para confirmar el diagnóstico.
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