Si bien los trastornos del olfato y el gusto rara vez son potencialmente mortales, pueden afectar su capacidad para disfrutar de la comida y la bebida, apreciar aromas agradables o detectar sustancias químicas y gases nocivos (como el gas natural o las fugas de productos químicos), lo que puede tener consecuencias más graves. El trastorno del olfato o del gusto también puede indicar la presencia de otras enfermedades inflamatorias o neoplásicas más importantes de la nariz y los senos paranasales.

La zona olfativa, situada en lo alto de la nariz, controla los sentidos del olfato y el gusto. Esto no debe confundirse con la sensación que proporcionan nuestras papilas gustativas en la superficie de la lengua, que solo determinan las sensaciones ácidas, dulces, saladas y amargas. La zona olfativa de la nariz distingue sabores más complejos, como el ajo, el orégano, otras especias y los vinos. Los olores de la comida entran en la nariz a través de la parte posterior de la nariz, mientras hace su tránsito hacia la garganta antes de tragar. En cambio, los olores de las emanaciones ambientales, como los perfumes, entran en la nariz por la parte delantera.

A veces, la parte delantera de la nariz ese obstruye por diversos trastornos inflamatorios, lo que impide la entrada de los olores ambientales. Sin embargo, la parte posterior de la nariz sigue abierta a los olores de los alimentos en la boca, por lo que los sabores complejos de los alimentos pueden seguir íntegros a pesar de la pérdida del olfato. La presencia del sabor tras la pérdida del olfato es una señal de que la zona olfativa puede estar todavía sana. Si faltan los dos, puede existir una lesión permanente del nervio olfativo, o puede haber una inflamación grave (pólipos) que obstruya toda la nariz.

Su capacidad olfativa y gustativa puede verse afectada por lo siguiente:

• Enfermedad temporal El resfriado o la gripe pueden hacer que pierda el olfato o el gusto de forma temporal o permanente. Esta es la causa más frecuente de pérdida aguda del olfato en más del 80 % de los pacientes.
• Edad: A medida que envejece, disminuye la cantidad de fibras nerviosas olfativas en la nariz, así como las papilas gustativas en la lengua, y las que quedan se vuelven menos sensibles con el tiempo.
• Hábitos personales: El consumo de tabaco, ciertos medicamentos y su higiene dental pueden afectar de forma negativa su capacidad olfativa y gustativa.
• Trastornos graves: Hay otros trastornos que pueden afectar el olfato y el gusto.
• Hiposmia: pérdida parcial del olfato.
• Anosmia: pérdida total del olfato.
• Hiperosmia: hipersensibilidad al olfato (como en el embarazo).
• Disosmia: fuerte aversión a los olores normales.
• Hipogeusia: pérdida parcial del gusto.
• Ageusia: pérdida total del gusto.
• Tumores: crecimientos que afectan el olfato o el gusto al obstruir la zona olfativa o destruir la zona olfativa y gustativa de la nariz.
• Convulsiones: puede provocar una breve y falsa sensación de olores vivos y desagradables, lo que se conoce como “alucinaciones olfativas”.

Pruebas

Exploración física
El médico realizará una exploración física completa y recopilará la historia clínica para comprender sus problemas de gusto y olfato.

Pruebas de olfato
El otorrinolaringólogo evaluará su capacidad para percibir olores frecuentes mediante sencillas pruebas en el consultorio. Para comprobar el sentido del olfato de más de 40 olores frecuentes, se realiza una prueba estandarizada, reconocida en todo el país, que consiste en rascar un objeto y olerlo. En función de sus selecciones de opción múltiple, se puntúa la prueba y se determina la presencia y la gravedad de la pérdida de olfato, según los datos de otras personas de su edad con una capacidad olfativa normal.

Endoscopia nasal
Se realizará una endoscopia nasal para determinar si la inflamación intranasal (debida a rinitis alérgica, sinusitis crónica o pólipos), o los tumores, pueden ser el origen de la pérdida de olfato.

Pruebas de imágenes
Se puede solicitar una tomografía axial computarizada (TAC) o una resonancia magnética (RM) de la cabeza, incluidos los senos paranasales, para comprobar si hay anomalías estructurales, inflamación o tumores que obstruyan o destruyan las fibras del nervio olfativo en la nariz o a nivel intracraneal (en la cabeza).

Tratamientos

Antibióticos
Si el otorrinolaringólogo cree que la causa del trastorno del olfato o del gusto es una infección, puede recetar un antibiótico para tratarla.

Vitaminas o suplementos
Algunos trastornos del olfato y del gusto pueden deberse a determinadas afecciones. El otorrinolaringólogo puede recomendarle que acuda a un especialista o recetarle un medicamento específico para su problema.

Abandono del tabaco
El otorrinolaringólogo le recomendará que deje de fumar, ya que puede afectar de forma negativa su capacidad olfativa y gustativa.

Evaluación de los medicamentos
Si toma con regularidad ciertos medicamentos, como los antihistamínicos o el antidepresivo amitriptilina, puede ver reducida su capacidad gustativa. El otorrinolaringólogo puede evaluar cómo estos (y otros) medicamentos que toma podrían afectar sus sentidos del olfato y del gusto.

Higiene dental
La gingivitis, o inflamación de las encías, puede afectar su capacidad de degustar con normalidad. Tendrá que abordar cualquier problema dental que tenga y trabajar para mejorar sus hábitos de higiene dental.

Sinusitis y cirugía
La sinusitis puede afectar el sentido del olfato y el gusto. Asimismo, los antecedentes de radioterapia en la garganta o las fosas nasales, la quimioterapia o la cirugía en la nariz pueden afectar de forma temporal o permanente el sentido del olfato.

¿Por qué debe elegir UHealth?

Atención de clase mundial en un sistema de salud académico. Se nos reconoce en todo el sur de la Florida y el mundo como líderes en el tratamiento de las afecciones y trastornos del oído, la nariz y la garganta. Con el respaldo de una de las mejores universidades del país, nuestro equipo utiliza las últimas tecnologías y la experiencia basada en la investigación para ofrecerle una atención superior y personalizada, así como los mejores resultados.

Líderes en investigación e innovación en rinología. Nuestro equipo de rinólogos participa de forma activa en la investigación de una variedad de tratamientos clínicos únicos para la pérdida del olfato y el gusto. Los investigadores investigan de forma activa el papel de las células madre olfativas en el sentido del olfato y el gusto, y su posible uso en la regeneración de nervios olfativos lesionados. Esta investigación se lleva a cabo en nuestro interdisciplinar Stem Cell Institute.