Los trastornos respiratorios son algunos de los problemas más frecuentes que afectan a los recién nacidos prematuros, ya que sus pulmones no están lo suficientemente desarrollados para funcionar con normalidad.

Cuando su bebé nace con un trastorno respiratorio, debe recibir los mejores cuidados para su hijo. El University of Miami Health System ofrece un equipo experimentado que se especializa en el tratamiento de recién nacidos con trastornos respiratorios, como el síndrome de dificultad respiratoria (SDR) y la displasia broncopulmonar (DBP).

El SDR afecta a los recién nacidos, principalmente a los bebés que nacen seis semanas o más antes de la fecha prevista. Por lo general, aparece dentro de las 24 horas posteriores al nacimiento. El SDR se debe a la falta de una sustancia (surfactante) que recubre los pulmones y permite que se llenen de aire. Los médicos suelen comenzar el tratamiento apenas nace el bebé y le brindan atención avanzada en la unidad de cuidados intensivos neonatales (UCIN).

Los factores de riesgo que pueden aumentar el riesgo de que el bebé desarrolle el SDR son los siguientes:

• Parto prematuro (más frecuentes en bebés nacidos antes de las 28 semanas de embarazo)
• Estrés durante el parto
• Infección

Si usted tiene diabetes, también puede aumentar el riesgo de que su bebé padezca el SDR.

Los bebés con SDR tienen mayor riesgo de padecer DBP. La DBP afecta sobre todo a los bebés nacidos de forma prematura que necesitan oxigenoterapia (asistencia respiratoria de una máquina) durante un período prolongado. La oxigenoterapia puede hacer que los pulmones se hinchen y cicatricen. La mayoría de los bebés se recuperan sin problemas de salud a largo plazo, pero la enfermedad puede ser grave y requiere cuidados en la UCIN.

La mayoría de los bebés con DBP presentan las siguientes características:

• Nacen 10 semanas o más antes de la fecha prevista
• Tienen problemas para respirar
• Pesan menos de 2 libras al nacer

Pruebas

Radiografía de tórax
Los médicos utilizan las radiografías de tórax para comprobar si hay signos de inflamación o infección en los pulmones. En una radiografía, también se detectan otros problemas, como un colapso o subdesarrollo pulmonar.

Análisis de sangre
Con los análisis de sangre, el médico del bebé corrobora si hay suficiente oxígeno en la sangre y determina la causa de los problemas respiratorios.

Ecocardiografía
En un ecocardiograma, se utilizan ondas de sonido (ultrasonido) para crear un video del corazón del bebé. Con esta prueba, los médicos pueden descartar defectos cardíacos o hipertensión pulmonar (presión arterial alta en los vasos de los pulmones) como causa de los problemas respiratorios.

Tratamientos

Oxigenoterapia
Los médicos utilizan diversos métodos para asegurarse de que el bebé reciba suficiente aire en los pulmones. El bebé puede necesitar lo siguiente:

• Ventilación: equipo de respiración (respirador) en el que se utiliza un tubo de respiración para suministrar aire. La máquina realiza la mayor parte o la totalidad de la respiración del bebé.
• Presión positiva nasal continua en las vías respiratorias (Nasal Continuous Positive Airway Pressure, NCPAP): consta de una máquina de NCPAP en la que se utilizan cánulas nasales o una máscara para suministrar aire a una presión constante. Este tipo de tratamiento se utiliza para los bebés que pueden respirar por sí mismos, pero que necesitan ayuda para que los pulmones funcionen correctamente.

Tratamiento de sustitución de surfactantes
Los recién nacidos con SDR no tienen suficiente surfactante (sustancia que reduce la tensión superficial) en los pulmones. Con este tratamiento, se suministra surfactante a través de un tubo respiratorio en los pulmones del recién nacido hasta que pueda producir surfactante por sí mismo.

Control continuo
El bebé se controlará de cerca mientras sigue creciendo, desarrollándose y curándose, tanto en la UCIN como cuando vuelva a casa. El neonatólogo comprobará con frecuencia sus signos vitales, la presencia de líquido en los pulmones y otros factores.

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