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Linfedema no relacionado con el cáncer

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El linfedema no relacionado con el cáncer son enfermedades o afecciones (no causadas por el cáncer) que afectan el sistema linfático, la red de tejidos, vasos y órganos que transporta un líquido específico llamado linfa por todo el cuerpo. Se producen cuando el sistema linfático está dañado o bloqueado, lo que impide que la linfa circule normalmente. Si no se tratan, estos trastornos pueden causar dolor, pesadez, hinchazón y otras complicaciones, como infecciones de la piel.

El linfedema no relacionado con el cáncer también puede ser secundario a una enfermedad o afección:

  • Insuficiencias venosas graves (cuando las venas tienen problemas para enviar sangre desde las extremidades hasta el corazón)
  • Cirugías para tratar afecciones no cancerosas
  • Infecciones o traumatismos del sistema linfático
  • Obesidad

Es importante que busque tratamiento de inmediato si cree que está experimentando esta afección, ya que no desaparecerá por sí sola. Si no se trata, el linfedema puede causar consecuencias graves a largo plazo.

Pruebas y tratamientos para el linfedema no canceroso

Examen físico
Su médico y terapeuta le realizarán un examen físico completo y recopilarán su historia clínica completa. para hacer el diagnóstico de linfedema.

Pruebas de diagnóstico por imágenes
Su especialista puede recomendarle que se someta a una prueba de diagnóstico por imágenes, como una resonancia magnética (RM), una tomografía computarizada (TC), una ecografía Doppler y/o una linfogammagrafía, para examinar de cerca el área de su cuerpo afectada por el linfedema.

Terapia de descongestión completa (CDT)
Los expertos de Sylvester y el Sistema de Salud de la Universidad de Miami han desarrollado un programa de rehabilitación especializado para ayudar a los pacientes con linfedema. La CDT incluye una variedad de tratamientos diseñados para estimular el flujo de linfa, reducir el riesgo de infección y disminuir la acumulación de líquido.

Un tipo de CDT es el drenaje linfático manual (MLD). Una técnica de masaje suave, la MLD ayuda a mover el líquido linfático fuera de la extremidad hinchada, como un brazo o una pierna. Luego, un especialista aplica un vendaje de compresión de elasticidad corta en la extremidad afectada para evitar que el líquido se vuelva a acumular. Nuestro equipo de especialistas linfáticos certificados lo ayudará a desarrollar un programa linfático en el hogar, que incluye ejercicios terapéuticos, y a elegir las prendas de compresión adecuadas para mantener la reducción de la hinchazón de brazos y piernas.

Prendas/vendajes de compresión
Los especialistas aplican vendajes de elasticidad corta en la zona afectada para ejercer presión y reducir la acumulación de líquido.

Cirugía de escisión
Los médicos pueden utilizar este tratamiento para eliminar tejido fibroso o dañado causado por el linfedema.

Liposucción
Se puede utilizar un tipo común de cirugía llamada liposucción para eliminar células grasas que pueden estimularse para crecer cuando el líquido se extiende al tejido a partir del linfedema. Esto puede mejorar la función y la estética de la extremidad.

Bypass linfovenoso
En este tratamiento innovador, las técnicas especializadas de supermicrocirugía crean una nueva vía para que el líquido linfático se desplace a través del cuerpo. Este procedimiento ayuda a reducir la hinchazón, mejorar la función y el rango de movimiento, y drenar el líquido de manera más eficiente.

Bombas neumáticas
Como tratamiento para el linfedema, las bombas neumáticas utilizan aire para inflar una manga que encierra el área afectada. La manga tiene múltiples cámaras que se inflan una tras otra para hacer que el líquido fluya en la dirección correcta.

Trasplante de ganglio linfático vascularizado
En este tratamiento microquirúrgico avanzado para el linfedema, un cirujano mueve los ganglios linfáticos de un área del cuerpo a la zona del cuerpo afectada por el linfedema. Los ganglios linfáticos recién colocados ayudan a mejorar el flujo de líquido y reducen la hinchazón, la rigidez y el dolor.

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