Los cánceres diferenciados de tiroides (differentiated thyroid cancers, DTC) incluyen los cánceres papilar y folicular de tiroides. Tienen una tasa de curación alta y pueden tratarse con una o con varias terapias.

Utilizamos las herramientas de diagnóstico más modernas, investigación de vanguardia y conocimientos avanzados sobre cáncer de tiroides para ayudarlo a obtener una salud óptima. Nuestros expertos se especializan en su tipo exacto de cáncer. Esto nos permite proporcionar un diagnóstico altamente preciso, generalmente a nivel genético, para que podamos identificar los mejores tratamientos.

Pruebas

Ultrasonido
El ultrasonido puede ayudar al médico a determinar si un nódulo tiroideo es sólido o está lleno de líquido. También se puede usar para verificar la cantidad y el tamaño de los nódulos tiroideos y para observar los ganglios linfáticos circundantes agrandados. El ultrasonido utiliza ondas sonoras de alta energía, que rebotan en los órganos o tejidos internos para formar una imagen (sonograma).

Exploración por TC (tomografía computarizada)
Una exploración por TC, también denominada exploración por TAC, toma una serie de imágenes detalladas del interior del cuerpo, desde diferentes ángulos. Se utiliza para determinar la extensión del cáncer y el plan de tratamiento.

MRI (imágenes por resonancia magnética)
Las imágenes por resonancia magnética (magnetic resonance imaging, MRI) combinan un imán, ondas de radio y una computadora para crear una serie de imágenes detalladas del interior del cuerpo. Al igual que las exploraciones por TC, las MRI pueden ayudar a determinar la extensión del cáncer y el plan de tratamiento.

Biopsia
Una biopsia es una muestra de tejido que se examina para detectar células cancerosas. Si se detecta cáncer, se puede hacer un análisis de la mutación genética del tumor para analizar las características moleculares específicas en el tumor. Esto nos ayuda a elaborar la recomendación de tratamiento más precisa.

Análisis de sangre de la hormona estimulante de la tiroides (TSH)
Esta prueba evalúa los niveles de la hormona estimulante de la tiroides y controla la actividad general de la glándula tiroides. También puede ayudar a determinar si usted se beneficiaría de la terapia de reemplazo de la hormona tiroidea después de la cirugía.

Análisis de sangre de T3 y T4 (hormonas tiroideas)
Esta prueba evalúa los niveles de las hormonas T3 y T4, las hormonas principales producidas por la glándula tiroides. Los niveles le indican al médico el funcionamiento de la glándula tiroides.

Prueba de tiroglobulina
La tiroglobulina es una proteína producida por la glándula tiroides. Esta prueba se utiliza después de la cirugía para determinar cómo respondió el cuerpo. El tratamiento debería generar un nivel muy bajo de tiroglobulina en la sangre. Si los niveles son altos, es posible que necesite un tratamiento adicional.

Prueba de calcitonina
La calcitonina es una hormona que ayuda a controlar de qué manera el cuerpo usa el calcio. Está compuesta por células C en la tiroides, que pueden derivar en cáncer medular de tiroides. Esta prueba se utiliza para diagnosticar este tipo de cáncer o su posible recurrencia después del tratamiento.

Prueba de antígeno carcinoembrionario (CEA)
Las personas que padecen cáncer medular de tiroides con frecuencia tienen altos niveles de esta proteína en la sangre. Esta prueba se puede usar después del tratamiento para observar sus efectos.

Tratamientos

Lobectomía
Este tipo de cirugía elimina únicamente el lado de la tiroides afectado por el cáncer. El cirujano también puede extirpar los ganglios linfáticos del área para ver si están afectados por el cáncer. Este procedimiento puede usarse para los tipos de cáncer diferenciados de tiroides pequeños o para aquellos que no muestran indicios de haberse propagado más allá de la glándula tiroides. Se extirpa el lóbulo canceroso, generalmente junto con el istmo (la parte que conecta los dos lóbulos).

Tiroidectomía casi total
Esta cirugía extirpa la mayor parte de la tiroides y solo deja una pequeña porción intacta.

Tiroidectomía total
Esta cirugía extirpa toda la tiroides. Después de que se extirpa la glándula tiroides, la mayoría de las personas recibe yodo radiactivo para destruir cualquier célula cancerosa remanente. Además, deberá recibir hormona tiroidea sintética para reemplazar las hormonas secretadas por la glándula tiroides.

Disección de ganglios linfáticos
El cirujano extirpará todos los ganglios linfáticos en el cuello que contengan células cancerosas. La extirpación de los ganglios linfáticos es especialmente importante para el tratamiento del cáncer medular y cáncer anaplásico de tiroides.

Preservación de la voz y de los nervios de las cuerdas vocales
El cáncer de tiroides y su tratamiento pueden afectar la laringe, las vías respiratorias y los nervios de las cuerdas vocales. Los oncólogos cirujanos de cáncer de cabeza y cuello de Sylvester tienen conocimientos especializados en la preservación de la voz y de los nervios de las cuerdas vocales para ayudar a las personas con cáncer de tiroides.

Tratamiento con yodo radiactivo
El tratamiento con yodo radiactivo se administra como una píldora o un líquido que se traga. El yodo radiactivo es absorbido por las células tiroideas y las células cancerosas tiroideas principalmente, por lo tanto, el riesgo de que dañe otras células en el cuerpo es menor. Este tratamiento se puede usar después de la tiroidectomía para cánceres diferenciados de tiroides para destruir las áreas microscópicas del cáncer de tiroides que no se extirparon durante la cirugía. No se utiliza para tratar los cánceres medular o anaplásico de tiroides. También se puede usar para tratar los casos de cáncer que reaparecen después del tratamiento o que se han propagado a otras partes del cuerpo.

El protocolo para este tratamiento incluye lo siguiente:

• Seguir una dieta con bajo contenido de yodo antes y durante el tratamiento. Al seguir una dieta con bajo contenido de yodo durante aproximadamente seis semanas, podemos asegurarnos de que las exploraciones del cuerpo después del tratamiento muestren únicamente la actividad del yodo incorporado con el tratamiento y no de los alimentos ricos en yodo que consume.
• Dos inyecciones intramusculares de hormona estimulante de la tiroides (thyroid-stimulating hormone, TSH) recombinante para preparar el cuerpo para el tratamiento.

Durante la radioterapia, debe tomar precauciones especiales por una semana aproximadamente después del tratamiento para proteger la salud de los demás. Se le pedirá estar en cuarentena radioactiva, lo que puede incluir uno o más días en el hospital y luego una semana en su casa. Además, deberá evitar el contacto cercano con otras personas (especialmente niños y mujeres embarazadas) y evitar compartir ropa de cama, instalaciones de preparación de alimentos o instalaciones sanitarias hasta eliminar la radiación del cuerpo.

Radioterapia de intensidad modulada (IMRT)
Este tipo avanzado de radioterapia de haz externo permite que los especialistas en radiación adapten o ajusten las dosis de radiación según la forma exacta de su tumor. Es ideal para los tumores de la tiroides que tienen forma irregular. Los especialistas en radiación pueden controlar la cantidad de radiación en cada haz dirigido al tumor. El control y la flexibilidad de la IMRT ayudan a minimizar la cantidad de radiación al tejido sano circundante. La IMRT puede ser una opción si no puede someterse a una cirugía y si el cáncer continúa desarrollándose después del tratamiento con yodo. También se utiliza para retardar el crecimiento del cáncer que se ha propagado a los huesos.

Quimioterapia
El tratamiento sistémico médico (denominado quimioterapia) casi nunca se utiliza en los DTC. Cuando es necesario, funciona al interferir con la capacidad de las células cancerosas de crecer o reproducirse. Estos medicamentos pueden suministrarse mediante una píldora o por vía intravenosa (a través de una aguja).

Terapia hormonal
Si se recomienda, tomar diariamente píldoras de hormona tiroidea puede tener dos propósitos:

• Mantener el metabolismo normal del cuerpo al reemplazar las hormonas tiroideas que faltan.
• Detener el crecimiento de las células cancerosas al disminuir los niveles de TSH.

Terapia dirigida
Las terapias dirigidas son medicamentos que detienen la capacidad de una célula cancerosa de crecer y propagarse. Estos métodos atacan únicamente a las células cancerosas, en lugar de a todas las células que se reproducen rápidamente (como en la quimioterapia). Los DTC que no responden a los tratamientos habituales pueden tratarse con terapia dirigida. Las terapias dirigidas generalmente se administran en la casa en forma de píldora una vez al día. Actualmente existen dos medicamentos dirigidos aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (Food and Drug Administration, FDA) para el tratamiento de los DTC.

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