La endoftalmitis, una infección ocular grave, puede desarrollarse repentinamente o, en algunos casos, gradualmente, después de una cirugía ocular, lesión ocular o infección bacteriana en otra parte de su cuerpo. Si su sistema inmunológico es débil, es más probable que contraiga esta infección ocular. Si su ojo se infectó debido a una cirugía, generalmente experimentará síntomas dentro de las seis semanas posteriores a la operación. Algunas personas se infectan a causa de una lesión, especialmente si tierra contaminada entró en contacto con el ojo durante la lesión.

Esta infección ataca la retina, una capa de tejido sensible a la luz ubicada en la parte posterior del ojo. La retina proporciona la visión central nítida que necesita para conducir, leer y realizar otras actividades importantes. Si bien es raro, la endoftalmitis causa ceguera y, a veces, incluso la pérdida del ojo si no se trata.

¿Cuáles son los síntomas?
Las personas con endoftalmitis podrían experimentar uno o más de los siguientes síntomas:

• Inflamación en la parte blanca del ojo
• Secreción blanca o amarilla sobre o dentro del párpado
• Una córnea turbia y blanquecina
• Inflamación, dolor y enrojecimiento de los ojos
• Visión disminuida
• Sensibilidad a la luz

Si tiene alguno de estos problemas, especialmente si recientemente se sometió a una cirugía, sufrió una lesión o tuvo una infección bacteriana, consulte a un oftalmólogo de inmediato. Afortunadamente, los atentos médicos del Bascom Palmer Eye Institute, parte del University of Miami Health System, diagnostican y tratan con precisión esta afección. Su objetivo es preservar y proteger su valiosa visión.

Pruebas

Examen oftalmológico: La clave para identificar esta afección ocular potencialmente peligrosa es un examen oftalmológico completo realizado por un oftalmólogo calificado.

Biopsia: Para averiguar qué organismo causó su infección, su médico toma una muestra (biopsia) de líquido de su ojo. La muestra se envía a un laboratorio para identificar el organismo y comenzar el tratamiento adecuado.

Tratamientos

Vitrectomía: Si su infección es repentina y tan grave que su visión se ve muy deteriorada, su médico le recomendará una vitrectomía de emergencia. En este procedimiento, un cirujano oftalmológico extrae los desechos infecciosos del interior del ojo. Luego, el cirujano inyecta un medicamento antibiótico o antifúngico dentro del ojo.

Inyecciones de antibióticos: Si su infección se detectó temprano y su visión no se ve gravemente afectada, su oftalmólogo puede inyectarle antibióticos o antifúngicos en el ojo para tratar la afección. Recibirá la inyección en el consultorio del médico. En algunos pacientes, las gotas antibióticas para los ojos funcionan bien, pero cada paciente con esta infección requiere exámenes oftalmológicos de seguimiento regulares para proteger su visión.

¿Por qué elegir el Bascom Palmer Eye Institute?

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